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DIA DEL MEDIO AMBIENTE 2017, a celebrar en Campomanes, Lena

El domingo 4 de junio las asociaciones ecologistas asturianas, las relacionadas con el tren y las vecinales de Lena celebramos el día del Medio ambiente en Lena.

El asunto a destacar es la condena del AVE y la defensa de los trenes de cercanías y media distancia, los que realmente usa la gente.

 

La Cirigüeña y la Asamblea de Vecinas contra el AVE estamos entre las asociaciones organizadoras.

 

NOTA DE PRENSA DE ANA SOBRE LOS INCENDIOS FORESTALES Y LOS ACOTAMIENTOS AL PASTOREO

 

ASOCIACIÓN ASTURIANA DE AMIGOS DE LA NATURALEZA

LOS INCENDIOS FORESTALES  DE ORIGEN GANADERO  SON A LA SOCIEDAD ASTURIANA COMO EL NARCOTRÁFICO A LA MEXICANA

Más de 254 incendios provocados en una semana, 4 de ellos GIFs (grandes incendios forestales de más de 500 Has), miles de hectáreas quemadas, graves daños ambientales, erosión con pérdida de suelo,  pérdidas económicas y lo que también es muy grave, cientos de delitos cometidos en el plazo de una semana con impunidad y desprecio a la ley y con la complicidad de otras personas y de una parte de la clase política asturiana.

Si en una semana hubiera habido en Asturias 254 delitos graves de otro tipo la sociedad estaría indignada, se exigirían responsabilidades inmediatas y habría manifestaciones a diario. Pero hay 254 delitos de incendios forestales provocados y la gente sigue tan tranquila. Sabe que, en unos días lloverá y nos olvidaremos.

Los incendios forestales son a la sociedad asturiana como el narcotráfico  a la sociedad mexicana o la colombiana, o como la corrupción a la clase política española, es decir, algo consustancial y asumido, aceptado y tapado por una parte importante de la sociedad, pese a lo que digan el sentido común, el código penal, la economía y la ciencia, lo que dificulta enormemente los esfuerzos para acabar con esas prácticas dañinas y delictivas.

Cuando se producen los incendios la prensa empieza a decir que la causa es la sequía, el viento o las altas temperaturas (aunque sea diciembre, o abril). Casi todos los políticos señalan que es pronto para saber si son intencionados, o no, o para atreverse a aventurar quien los provoca, o por qué. Y la mayoría de la sociedad mira para otro lado.

Incluso los más próximos a los incendios, la población rural, que, en muchos casos, saben qué persona los provocó y por qué razón, se encierran en su casa para no ver nada y no quieren hablar una palabra del origen del incendio, igual que en el País Vasco o Sicilia cuando había un asesinato, aplican la ley del silencio.

En Asturias, en relación a este asunto, tenemos una sociedad enferma. Enferma de clientelismo en el mundo político, de desconocimiento, temor y solidaridad destructiva en el mundo rural y de indiferencia por el medio rural en el mundo urbano.

Sin embargo, lo que parece tan difícil de ver por  nuestros políticos y la sociedad, es fácil de encontrar en cualquier libro de primaria de nuestros hijos. Recuerden lo de la ardilla que hace siglos cruzaba la península de árbol en árbol y cómo los agricultores y ganaderos, nuestros antepasados, para ampliar las tierras de cultivos y los pastos fueron quemando y roturando buena parte de los montes ibéricos. La vieja guerra entre los campesinos y el monte bravo, que en Asturias, después de muchos siglos y por las características de nuestra economía,  paisaje y vegetación, sigue teniendo sangrientas batallas cada vez que las condiciones climatológicas lo permiten.

Cada año que pasa, incluso, la guerra tiene más munición, debido al despoblamiento del mundo rural que hace que cada paisano, activo o semiactivo, tenga a su disposición cientos o miles de hectáreas muy abruptas que no es capaz de mantener como a él le gustaría por medios manuales o mecánicos, que no quiere que vuelvan a ser monte bravo y que intenta moldear con el fuego, como en el neolítico, de forma clandestina y a lo bestia. Y tal vez alimentada por una política de ayudas de la UE calculadas en función de la superficie de pastos de montaña que mantiene cada ganadero, que habrá que modificar para que contribuya a disminuir la erosión y mejorar el medio ambiente y la biodiversidad y no a cargárselos definitivamente.

¿Qué podemos hacer para curar esta enfermedad social y acabar con los incendios forestales intencionados?. Muchas cosas: cambiar algunos elementos de la política agraria, forestal y de desarrollo rural y de la legislación (reorientando las obras, las líneas de ayudas y retomando los acotamientos de los montes incendiados), ampliar las campañas de educación ambiental, sobre todo a nuestros niños (el monte produce bienes públicos esenciales que son de de todos), mejorar los recursos humanos y tecnológicos destinados a evitar que se produzcan incendios y a descubrir y condenar a los culpables cuando se produzcan (¿habrá que usar satélites espía muy precisos o llenar el monte de cámaras o drones en los momentos de riesgo?), etc.

Pero quizás por lo que hay que empezar es por reconocer que, en Asturias, tenemos esa enfermedad, y que es un virus resistente, sobre todo, de origen ganadero. Si no queremos saber quien quema el monte y por qué razones, si no nos quitamos la venda de los ojos, no podremos tomar las medidas necesarias para curar la enfermedad y acabar con los incendios. Y por eso compartimos las declaraciones del Alcalde de Allande y las del jefe de la Guardia Civil de Asturias que se han atrevido a recordar con claridad que detrás de los incendios forestales en Asturias está, casi siempre, el deseo de ampliar pastos, y en los de este mes, muy agravado por la reciente modificación de la Ley de Montes, en contra del criterio de los expertos, para suprimir los acotamientos al pastoreo de las zonas incendiadas, que era una de las pocas medidas eficaces para evitar esos incendios.

La PAC, los incendios y los acotamientos al pastoreo.

Artículo de Joaquín Arce en el diario EL COMERCIO 1 de octubre de 2016

 

La  Unión Europea, comenzó a formarse a mediados del siglo XX con la intención de tener un mercado común y conseguir la libre circulación de personas y capitales en Europa. Se pretendía también avanzar hacia la unión política y superar así las guerras y los nacionalismos de la primera mitad del siglo XX, enfermedades sociales recurrentes que todavía sufrimos hoy en día.

Desde el principio se consideró que había que evitar las consecuencias negativas del mercado único en el medio rural. Para ello se puso en marcha una Política Agraria Común (PAC) que sustituía a las políticas agrícolas nacionales o regionales y con la que se pretendía defender al sector primario de la competencia exterior y mantener los precios y  las rentas de todos los agricultores y ganaderos. Durante décadas la PAC fue, con mucho, la principal política de la UE en relación al gasto, consumiendo la mayor parte del presupuesto europeo.

Con los años, el comercio internacional se fue liberalizando en todo el mundo y la PAC, poco a poco, se reorientó hacia el desarrollo rural y la defensa del medio ambiente europeo.

En el siglo XXI la PAC disoció la mayor parte de sus ayudas de la producción y la estabilización de precios (porque era algo que iba contra las normas internacionales de libre comercio) y las vinculó al mantenimiento de rentas de los agricultores y el cuidado del territorio y el medio ambiente, así como a la innovación y el desarrollo rural. En Europa ya no interesa tanto el producir gran cantidad de bienes de consumo a precios determinados como prestar servicios, obtener bienes públicos ambientales y mantener vivo y sano el medio rural.

La PAC redujo su importancia en el presupuesto de la UE (actualmente ya sólo supone el 39% del gasto) y se orientó hacia el apoyo a la producción de bienes públicos como el paisaje, los ecosistemas y los sistemas agronómicos europeos.

Las ayudas de la  PAC vigente para el periodo 2015-2020 en el que nos encontramos, son complejas, pero consisten, sobre todo, en un “pago básico”, por superficie utilizada por los agricultores o ganaderos, que supone en torno al 70 por ciento de la ayuda y un pago “verde” o por “ecologización (respetar las prácticas beneficiosas para el clima y el medio ambiente) que supone, al menos, un 30% de la ayuda. No respetar los requisitos ecológicos comporta sanciones muy elevadas.

Asimismo en la actual PAC los pagos citados se supeditan, por la llamada “condicionalidad”, a que los agricultores y ganaderos cumplan otras normas sobre condiciones agronómicas y medioambientales dirigidas a limitar la erosión del suelo (junto con el agua, el mayor tesoro para la vida), mantener su estructura y los porcentajes de materia orgánica, las normas sobre salud pública, salud  y bienestar animal, uso del agua, plaguicidas y medio ambiente y a garantizar un nivel mínimo de mantenimiento de las fincas por los titulares. Si un agricultor, o ganadero, en el caso más común  de Asturias, no cumple esas normas de condicionalidad, los pagos directos que recibe se reducen parcialmente, o se suprimen.

En este escenario, no se puede entender, salvo por clientelismo cegarato, la propuesta de varios grupos parlamentarios de la Junta General del Principado de Asturias de modificar la Ley de Montes regional para eliminar la obligatoriedad de acotar al pastoreo las zonas quemadas por los incendios forestales, medida que se regula en Asturias desde la Edad Media y que tiene por finalidad permitir la regeneración de los suelos y vegetación dañados por los incendios y desincentivar las prácticas de uso de los incendios para generar o mantener pastos.

Con una cortedad de miras y un electoralismo lamentable, los diputados que promueven este cambio legal ceden a las presiones de grupos de interés que pretenden conseguir más ayudas por superficie pastable para algunos ganaderos engañando a la UE en lo que para todos es más importante en estos momentos: la sostenibilidad ambiental y del clima.  Favoreciendo los incendios forestales y permitiendo que sus daños se agraven, igual se consigue cobrar un poco más por superficie pastable a la UE, muy a corto plazo. Pero estamos seguros de que, a medio plazo, la UE no se dejará engañar. No permitirá que se erosionen y se pierdan los suelos agrarios y forestales de nuestra región, parte de Europa, y se atente contra la biodiversidad por beneficios económicos a corto plazo. Y seguro, que a no mucho tardar, se endurecerán las condiciones para conseguir las ayudas por parte de los ganaderos y se aumentarán los requisitos medioambientales.

Desde luego, si ese cambio legislativo prospera en la Junta General  y los incendios forestales vinculados a la generación de pastos, como es de prever cuando los incentivos cambian, se mantienen o aumentan, los ecologistas asturianos trabajaremos ante la UE para que se apliquen las sanciones que procedan por incumplimiento de la condicionalidad y para que se revisen las líneas de ayuda de la PAC, de forma que se garantice que el resultado no sea obtener mas fondos a costa de lo que sea, ni producir más, sino conseguir el mantenimiento y sostenibilidad de nuestras montañas y sistemas ganaderos.

En la época de la globalización, las montañas europeas, y entre ellas las cantábricas (ejemplos de las tierras marginales típicas que sólo entran en producción en tiempos de escasez) no reúnen condiciones ni deben ser un lugar de producción intensiva  (herbicidas, pesticidas, incendios, residuos sólidos y líquidos…) y erosión y agotamiento de los recursos básicos para la vida, como el suelo. No tendría sentido ni económico ni ambiental. La montaña debe ser un lugar de conservación de paisajes y ecosistemas, de generación de aire puro y agua limpia, de lucha contra el cambio climático, de producción de alimentos ecológicos con denominación de origen y de servicios de ocio, turísticos y ambientales.

Si la ganadería asturiana no es capaz de cumplir con esos objetivos medioambientales que los europeos necesitamos alcanzar, a medio plazo se encontrará en el mismo caso que la minería asturiana: deberá enfrentarse al futuro sin subvenciones de la UE, compitiendo, si pueden, en calidad y precio con los productores del resto del mundo o deberá ver como se van cerrando gran parte de sus explotaciones.

Por eso, la decisión es nuestra y los acotamientos al pastoreo son cruciales en este asunto. O optamos por forzar la PAC para intentar obtener más ayudas a corto plazo eliminando los acotamientos, saltándonos las normas y quemando nuestros montes como en el neolítico y con ellos, nuestro porvenir…. o asumimos y nos creemos, de verdad, como tiene que ser el futuro de Europa y de la Tierra, y avanzamos decididamente de la mano de la UE hacia la sostenibilidad medioambiental y la conservación del suelo, el agua, el clima, las especies y los ecosistemas. Esperemos que nuestros ganaderos y políticos sepan escoger el camino correcto.

 

Joaquín Arce Fernández

Ecologista y economista.

Alegaciones al Estudio de Impacto Ambiental / Proyecto de acondicionamiento general de la carretera AS 117 tramo  CAMPO DE CASO –PUERTO DE TARNA

CONSEJERÍA DE INFRAESTRUCTURAS, ORDENACIÓN DEL TERRITORIO  MEDIO AMBIENTE.

 

En relación a ese documento, la  Asociación Medioambiental La Cirigüeña,   considera necesario alegar lo siguiente:

 

 

1.-JUSTIFICACIÓN DE LA ACTUACIÓN EN ESTA CARRETERA EN RELACIÓN CON LOS CRITERIOS TÉCNICOS DEL PDI Y EL PAT DE CARRETERAS 2015-2030.

 

El Plan Director de Infraestructuras 2015-2030 (PDI), en su Programa de Actuación Territorial de Carreteras,  recoge las características de trazado y de tráfico de la red asturiana de carreteras. En base a las Intensidades Medias de Trafico Diarias (IMD), número de accidentes, y la situación actual de los firmes establece unos criterios para decidir que obras hay que realizar.

 

En concreto, según el PDI la carretera AS 117 en el tramo Campo de Caso- Puerto de Tarna, objeto de este EIA, tenía en 2012  una Intensidad Media Diaria de tráfico de 380 vehículos , 31 de ellos pesados.

 

Esta IMD es muy baja, de las más bajas de la red regional y es debida a que estamos hablando del tramo de la AS 117 situado por encima de Campo de Caso, es decir, un tramo de montaña que no da acceso a ninguna población significativa ni a instalaciones industriales o de servicios que muevan tráficos de vehículos.

El tramo de la AS 117 objeto de este proyecto y EIA en realidad tiene como única función la articulación de los tráficos de la zona alta del Parque Natural de Redes y de algunas pequeñas aldeas que hay en su interior, así como el enlace, de forma ocasional y marginal, con la comunidad vecina de Castilla y León, enlace para el que hay soluciones de comunicación mucho más eficientes como, por ejemplo, la autovía del Huerna.

 

Esa baja IMD y las características de la zona y tráficos a la que da servicio esta carretera hace que, en realidad, sea mucho más razonable considerar el tramo Campo de Caso- Puerto de Tarna  como Carretera Comarcal, o, mejor, como luego propondremos, carretera “turística” o “verde”.

 

Asimismo, según el PDI, las características objetivo para carreteras de la red regional con esa IMD menor de 500 vehículos es de 6/6, es decir carriles de 3 metros de anchura. Los 7 metros de anchura sólo se fijan como objetivo para carreteras con IMD entre 2000 y 5000 vehículos día, tráficos muy elevados a los que creemos que nunca llegaría ni debería llegar esta carretera, aunque se acondicionase.

Además si consideramos como carretera comarcal al tramo Campo de Caso Puerto de Tarna su anchura objetivo debería ser, según el Plan de 5.5, por ser una zona de montaña.

 

Vemos por tanto que el proyecto que analizamos no respeta, por exceso, las propias especificaciones del PDI  y está claramente sobredimensionado porque tanto la Alternativa 1 como la 2 prevén carriles de 3.5 metros (7 m. en total, a los que en la alternativa 1 se añaden arcenes de 0.5 metros y en la 2, no) que no se justifican en ningún caso con las IMD existentes, ni con los criterios generales del PDI ni, desde luego con las características ambientales y de necesidades de la zona que atraviesa.

 

Los defensores de las alternativas de 7 metros podrían señalar que esta obra figura en el PDI como una “actuación singular” con 30 millones de presupuesto entre 2015 y 2030 y podrían alegar que la carretera AS 117, en lugares muy por debajo de Campo de Caso, supera esas IMD, pero son argumentos claramente “tramposos” que van contra toda lógica de planificación y gestión económica racional de infraestructuras y desde luego, contra los planteamientos objetivos del PDI.

 

Por todo ello consideramos que la única actuación que se justificaría en esta carretera entre Campo de Caso y Puerto de Tarna debería ser de entre 5.5 y 6 metros de calzada, según tramos, lo que invalida el proyecto presentado a EIA ya que no se contempla el análisis de esta alternativa.

 

Asimismo consideramos que el tramo Campo de Caso a Puerto de Tarna, por sus características y tráficos rodados debería encajarse entre las carreteras de la red comarcal, como mucho, y no como vía de la red regional.

 

 

2.- NECESIDADES DE TRÁFICO Y COMUNICACIÓN EN EL PARQUE NATURAL DE REDES

 

Vista la ubicación y características de esta carretera creemos que debe descartarse tanto su consideración principal de vía “regional” como la de comunicación “interregional”.

 

No cumple ninguna de esas funciones, ni tiene vocación de hacerlo, como se puede ver en la IMD que alcanza y en las alternativas que existen para el tráfico interregional, que como ya dijimos, son mucho mejores y más eficientes.

 

Estamos por tanto ante una vía de carácter local o comarcal que, además presenta otras singularidades:

 

  • Atraviesa el corazón de un Parque Natural, reserva de la Biosfera, ZEC,  etc, es decir, un territorio ambientalmente muy valioso y lleno de fauna salvaje y ganado.
  • Debido a la orografía abrupta del territorio de Caso, esta carretera junto al río Nalón es la principal y casi única vía de comunicación para los tráficos rodados de vehículos pero también para los demás tráficos que se deben tener en cuenta siempre, aunque este EIA no lo haga, que son los tráficos peatonales de los habitantes de ese concejo, los tráficos de ganado (vacas sobre todo) que se realizan en muchas ocasiones por la propia carretera AS 117 al no haber alternativas, el tráfico ciclista y el tráfico senderista y turístico (que requiere aceras o sendas peatonales, carriles de baja velocidad, aparcamientos, miradores, zonas de acampada o , etc)
  • También se debe tener en cuenta el continuo cruce de animales salvajes por este tramo de carretera, en toda la extensión de la misma.  Los ungulados, jabalíes, etc  cruzan de día y de noche esta carretera, que, por tanto, debe ser permeable a esos movimientos y debe tener un tráfico rodado de baja velocidad.
  • No debemos olvidar que, entre Campo de Caso y Tarna hay muy pocos pueblos y  apenas viven unos pocos cientos de personas y junto a ellas, más de 5.000 vacas, un millar de caballos, ovejas y cabras,  y varios miles de ciervos, corzos, rebecos, jabalíes y otros animales de valor ambiental y tamaño considerable como para tenerlo en cuenta a la hora de planificar una carretera y la velocidad deseable para la circulación segura.

 

 

Vemos por tanto que el territorio que articula esta carretera requiere que ésta respete, como características de diseño de la reforma de la misma, las siguientes:

 

  • Debe ser una vía muy lenta, creemos que con un límite de 50 kms/hora, es decir, que tenga en cuenta la presencia en la propia carretera de otros tráficos aparte del de vehículos a motor como los ya señalados, y que garantice la seguridad. Además no hace falta velocidad porque los vehículos que pasan por esta carretera, en su gran mayoría, hacen recorridos de corta distancia, van o vienen a los pueblos del concejo o lo recorren con fines turísticos, deportivos o de ocio. Los datos de la IMD así lo confirman. Y el principal tráfico interregional actual, el de camiones con carbón desde el puerto del Musel a las térmicas de León, aparte de tener otras alternativas de circulación, tiene sus días contados ante el inminente cierre de esas térmicas de carbón.
  • Debe ser una vía que facilite la circulación de los peatones, los ciclistas y  las vacas y para ello sería necesario que destinara parte del espacio de la misma a esos tráficos con aceras, arcenes o un carril aparte cuando fuera posible o con el acondicionamiento de vías alternativas paralelas o próximas a la carretera. Tanto la alternativa 1 como la 2 y el propio EIA ignoran totalmente esta cuestión como si en el municipio de Caso no hubiera nada más que vehículos a motor, camiones de 9 metros y como mucho, alguna especie de fauna y flora protegida.
  • Debe ser una carretera totalmente permeable y también segura para la fauna salvaje, en la que se minimicen los accidentes entre coches y animales. Eso implica que no debe tener cierres ni grandes desmontes o muros verticales ni permitir una velocidad de circulación que provoque esos accidentes.
  • Para el adecuado uso y disfrute de los recursos del parque natural debe ser una carretera que facilite las paradas y cuente con numerosos aparcamientos bien acondicionados, áreas recreativas y de descanso, miradores, etc
  • No hacen falta, en ese contexto, variantes para evitar poblaciones como la de Soto de Caso y si por seguridad se hace, debe ser una actuación blanda, que no aísle al pueblo ni impacte en el entorno de esa población ni la separe de los tráficos turísticos.

 

En resumen, el diseño de la vía debe ser el de una “carretera turística” o “carretera verde”, con límite de 50 kms hora, amigable para los usos  recreativos y ganaderos, no una carretera rápida con carriles de 3,5 metros y arcenes de 0,5 o inexistentes y con sobreanchos adaptados a los camiones de 9 metros, como absurdamente contemplan las dos alternativas sometidas a estudio.

 

 

  1. ACTUACIONES COMPLEMENTARIAS

 

Las alternativas sometidas a estudio contemplan una única actuación complementaria: el acondicionamiento de la travesía  de Soto de Caso, una vez que se haga una nueva variante de alto impacto de esa población.

 

Entendemos que este proyecto de mejora de la carretera, dotado de amplio presupuesto en los tres horizontes del Plan Regional, debería pasar de enfocarse como un acondicionamiento general de una vía de la red regional (algo que como hemos visto no es necesario ni conveniente por falta de tráfico y por las características medioambientales de la zona) con grandes movimientos de tierras y nuevas estructuras, a enfocarse como el acondicionamiento parcial, o mejora de firme, de una carretera “turística o verde”, sin apenas  movimientos de tierras, nuevos muros, puentes, etc, pero con numerosas pequeñas actuaciones complementarias que mejoren su funcionalidad en ese aspecto. Entre las actuaciones complementarias que debería incluir este proyecto de obras en la AS 117 entre Campo de Caso y Puerto de Tarna, además de, en su caso, la citada variante de Soto de Caso, estarían las siguientes:

 

  • El acondicionamiento cuidadoso y completo del Camín Real desde el puerto de Tarna a Campo de Caso, (al menos) para facilitar los tráficos senderistas, de ganado, etc
  • La rehabilitación respetuosa con el entorno de todos los caminos tradicionales colindantes con la carretera, de forma que enriquezcan su utilidad turística y ganadera.
  • El acondicionamiento de una red de áreas recreativas y de descanso, aparcamientos miradores y pequeñas zonas de baño y de acampada o vivaqueo en las márgenes de la carretera
  • La señalización y acondicionamiento de una ruta ciclista que transcurra por la propia carretera, por el Camín real,  o por su entorno, con carriles propios o garantías de seguridad suficiente.
  • El acondicionamiento y señalización de la propia carretera como vía ganadera, con mangas y cierres donde fuera necesario, con variantes ganaderas donde haya túneles y con una velocidad de circulación baja compatible con el ganado y la fauna salvaje.
  • La rehabilitación de aquellos edificios, cabañas, fuentes, capillas, lavaderos, monumentos o demás equipamientos públicos próximos a la carretera que contribuyan a aumentar el interés ambiental, cultural o turístico de la zona.
  • El acondicionamiento de los accesos a los pueblos próximos como Pendones, Tarna,  etc

 

 

4.-RED DE CARRETERAS TURÍSTICAS O “VERDES” DE ASTURIAS

 

 

La carretera Campo de Caso-Puerto de Tarna así acondicionada como carretera turística o “verde” debería incluirse en una nueva categoría, con esa denominación, en la que se incluyeran otras vías y con las que se formara una red.

 

Otras vías a rehabilitar de esa manera e  incluir en esa red deberían ser, entre otras, al menos las siguientes:

 

  • La carretera de Infiesto a Campo de Caso, también en el Parque Natural de Redes (con su tramo de Camín Real)
  • La carretera del Puerto de la Cubilla
  • Las carreteras de Ponga (PO 1 a 6)
  • Las carreteras de Morcín (MO 1 y 2) y el entorno del embalse de Los Alfilorios
  • Las carreteras al puerto de Somiedo y Valle del Lago
  • La carretera AS 348 del Puerto del Connio. Esta vía en particular son 36,2 kms de calzada que atraviesan la reserva de Muniellos con una IMD de sólo 348 vehículos día, cuando los tiene, porque en invierno pasa temporadas cerrada. La gran  mayoría de los tráficos rodados de esta carretera cuentan con la alternativa del puerto de las Mujeres Muertas. Por tanto, la carretera del Connio, por su altísimo valor ambiental, debería recibir un tratamiento muy especial que consistiría en cerrarla al tráfico rodado libre (salvo residentes de los pueblos próximos  y servicios y personas autorizadas), descatalogarla como carretera, dotarla de un firme más amable, y darle un uso preferentemente peatonal y acompañado por guías y empresas concesionarias de la zona, al igual que se hace en la actualidad con las visitas a Muniellos desde Moal.

 

 

Visto todo lo anterior, SOLICITAMOS:

 

1.- Que se retire el presente proyecto de ACONDICIONAMIENTO GENERAL DE LA CARRETERA AS-117 TRAMO CAMPO DE CASO –PUERTO DE TARNA y su Estudio de Impacto Ambiental, por no ser coherente con el propio PAT del Plan Director de Infraestructuras al prever una anchura de calzada y un volumen de obras, en las dos alternativas contempladas, excesivo en relación con los criterios del Plan, la IMD de la carretera y el valor ambiental de la zona. Además el EIA en realidad no contempla alternativas variadas, como es preceptivo, porque las dos alternativas presentadas, en lo principal, son muy parecidas,  tienen el mismo ancho de vía, representan el mismo modelo de uso, tienen un insoportable impacto ambiental en el parque natural y dificultan si no impiden, los demás usos principales actuales de la vía.

 

2.- Que se vuelva a presentar un proyecto que incluya entre las alternativas al menos una actuación de acondicionamiento blando, con anchuras de calzada de 5.5 o 6 metros como máximo, tal como establece el PDI, con escasos movimientos de tierras y velocidad limitada a 50 kms/hora Esta alternativa debería analizar y dar prioridad sobre los coches y camiones a las necesidades de tráfico turístico, colectivo, peatonal, ciclista y ganadero así como la existencia de miles de animales salvajes que cruzan a diario la carretera. E incluir un amplio listado de actuaciones complementarias que faciliten la diversidad de usos.

 

3.- Que con el fin de adaptar el PDI a las necesidades medioambientales y sociales de algunas zonas se establezca en el mismo la categoría de “carretera turística o carretera verde” que, en los espacios naturales o de interés turístico facilite la coexistencia armónica de los vehículos a motor con los demás usuarios de las carreteras (peatones, ciclistas, ganado y animales salvajes) y se califique como tal, entre otros, este tramo de carretera.

 

En Morcín, a 14 de noviembre de 2016